Tarta de queso al horno: ¡Y con poco azúcar!

 ¡Hola a todos! Hoy les traigo una receta que seguramente les encantará: Tarta de Queso Clásica. Esta tarta es cremosa, suave y con un toque de vainilla, perfecta para cualquier ocasión. Es sencilla de hacer, y su sabor es inigualable. ¡Vamos a empezar!



Ingredientes:

Para la base:

  • 200 g de galletas tipo Digestive (puedes usar galletas María o Graham)
  • 100 g de mantequilla derretida

Para el relleno:

  • 600 g de queso crema (tipo Philadelphia) a temperatura ambiente
  • 200 g de azúcar
  • 200 ml de nata para montar (crema de leche)
  • 3 huevos
  • 2 cucharadas (30 g) de harina de trigo
  • 1 cucharadita (5 ml) de extracto de vainilla
  • Ralladura de un limón (opcional, para un toque fresco)

Para la cobertura (opcional):

  • Mermelada de frutos rojos o cualquier mermelada de tu preferencia
  • Frutas frescas como fresas, arándanos o frambuesas

Instrucciones:

  1. Prepara la base:

    • Precalienta el horno a 180°C.
    • Tritura las galletas hasta convertirlas en migas finas. Puedes hacerlo en un procesador de alimentos o colocando las galletas en una bolsa y aplastándolas con un rodillo.
    • Mezcla las migas de galleta con la mantequilla derretida hasta que estén bien combinadas.
    • Presiona la mezcla de galletas en el fondo de un molde desmontable de 23 cm, asegurándote de que quede una capa uniforme. Puedes usar el dorso de una cuchara para compactar bien.
    • Hornea la base durante 10 minutos, luego retira del horno y deja enfriar mientras preparas el relleno.
  2. Prepara el relleno:

    • En un tazón grande, bate el queso crema con el azúcar hasta que esté suave y cremoso.
    • Añade la nata para montar y mezcla bien.
    • Incorpora los huevos, uno a uno, batiendo bien después de cada adición.
    • Añade la harina, el extracto de vainilla y la ralladura de limón (si la usas). Mezcla hasta que todos los ingredientes estén bien integrados.
    • Vierte el relleno sobre la base de galleta ya enfriada, alisando la superficie con una espátula.
  3. Hornea la tarta:

    • Reduce la temperatura del horno a 160°C.
    • Coloca el molde en la rejilla del medio y hornea durante 50-60 minutos. La tarta debe estar cuajada en los bordes pero aún ligeramente temblorosa en el centro.
    • Apaga el horno y deja la tarta dentro con la puerta entreabierta durante una hora para que se enfríe gradualmente. Esto ayuda a prevenir que se agriete.
  4. Enfría y decora:

    • Una vez que la tarta esté a temperatura ambiente, refrigérala durante al menos 4 horas, o preferiblemente toda la noche, para que adquiera la textura perfecta.
    • Antes de servir, puedes cubrir la tarta con mermelada de frutos rojos y decorar con frutas frescas.
  5. Sirve:

    • Desmolda la tarta con cuidado, colócala en un plato y corta en porciones.
    • Disfruta de esta deliciosa tarta de queso, cremosa y con un toque justo de dulzura.

Consejos y trucos:

  • Temperatura del queso crema: Asegúrate de que el queso crema esté a temperatura ambiente para que se mezcle de manera suave y sin grumos.
  • Baño maría: Para una tarta de queso aún más suave, puedes hornearla en un baño maría. Envuelve la base del molde en papel de aluminio para evitar que entre agua y colócalo en una bandeja con agua caliente.
  • Ajuste de dulzura: Si prefieres una tarta menos dulce, puedes reducir la cantidad de azúcar a 150 g.

¡Espero que disfruten de esta deliciosa Tarta de Queso Clásica! Es un postre perfecto para compartir con familia y amigos, y su sabor casero es insuperable. ¿Qué les parece? ¿Se animan a probarla?

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